De un Santuario de María Auxiliadora a otro fue un traslado solicitado y programado.
No fue un aterrizaje de emergencia. Mi aterrizaje en Vigo no fue un trauma; fue, podríamos decir, amable.
Si, con su pizca de nostalgia, por dejar atrás más de 50 años deambulando por aquellas tierras levantinas: Burriana, Godelleta, El Campello, Alicante, Ibi, Elche, Villena, Cartagena, Barcelona…
La nostalgia por dejar Alicante se mitiga porque Alicante y Vigo tienen una larga historia salesiana.
En ambas ciudades se quiere a los Salesianos, y en las dos hay un Santuario-Parroquia dedicado a María Auxiliadora.
Santuario de M. Auxiliadora en Alicante
Los alicantinos dicen que Alacant es la millor terreta del mon. Y es verdad que Alicante tiene un clima envidiable. Lo tienen todo: buen clima, turismo, agricultura, industria…
Por otro lado, todos conocemos las bondades climatológicas de Vigo. Así que no costó excesivamente el cambio.
Lo penoso fue los amigos y conocidos que tuve que dejar allí; claro que con muchos de ellos sigo unido por Internet informática.
Hace más de 50 años, siendo un chaval, me reclutaron y llevaron a esas tierras para aprender a ser Salesiano y sacerdote y por allí anduve todos estos años.
Aprovechando la unificación de las Inspectorías de España, solicité la incardinación en la Inspectoría de Santiago Mayor, solicitud aprobada por los dos inspectores de entonces y el visto bueno del Rector Mayor.
Don José R. Pacheco me destinó a Vigo “Mª Auxiliadora” y Don Aureliano Laguna (q.e.p.d.) me nombró Delegado de los Antiguos Alumnos de D. Bosco.
Han transcurrido 8 años y puedo decir que no me he aburrido.
Procesión de María Auxiliadora, Alicante.
Procuré estar presente en todas las reuniones y actividades que se desarrollan en el año, que no son pocas. En concreto las actividades de formación y celebraciones religiosas, retiros, charlas, etc…
Me gustaría tener una varita mágica para…
En primer lugar, erradicar el virus que nos azota y nos impide normal de la programación de este año y tal vez del que viene, que ya están preparadas.
En segundo lugar, rejuvenecer, sobre todo a la Junta Directiva.
El espíritu es joven y las ilusiones muchas, las fuerzas físicas en cam cambio, disminuyen.
¡Vamos a ser optimistas!, el panorama va a mejorar pronto.
El Señor está con nosotros, Mª Auxiliadora y Don Bosco nos abren camino para seguir adelante.
De un Santuario de María Auxiliadora a otro es ir del cielo de Alicante al cielo de Vigo.
Texto: Luciano García.
Ahora esperamos querido Luciano que no te aburras en los próximos ocho años para que sigas derramando tu entusiasmo y alegría entre nosotros.