El Papa Francisco simpatiza con Don Bosco, es un gran admirador de Don Bosco.
Define a Don Bosco como
“portador sano de la alegría del Evangelio».
Así lo considera al escribir el prefacio del libro “Evangelii gaudium con Don Bosco”, de Antonio Carriero, que comienza: “Queridos salesianos… “
El Santo Padre recuerda a los salesianos «la medida alta de la vida cristiana» que su santo fundador puso en práctica en la periferia de Turín.
Dice que los Salesianos «somos afortunados», porque el fundador, Don Bosco, no era un santo con rostro de «viernes santo», triste o huraño. Sino que tenía cara de «Domingo de Pascua».
Escribe el Papa:
“Estaba siempre alegre y siempre era acogedor, a pesar de las tantas fatigas y dificultades que lo asediaban cotidianamente».
El Obispo de Roma también recuerda que como se lee en sus memorias biográficas,
«su rostro radiante de alegría manifestaba, como siempre, la satisfacción que le producía encontrarse con sus hijos».
Y no es casual que para él,
“la santidad consistiera en el hecho de «estar muy alegres».
De ahí que se lo pueda definir como un «portador sano» de esa «alegría del Evangelio» que propuso a Domingo Savio y a todos ustedes salesianos, como estilo auténtico y siempre actual de la «medida alta de la vida cristiana».
El pontífice afirma que Don Bosco propuso un «mensaje revolucionario» en un tiempo en el que los sacerdotes vivían con desapego la vida del pueblo.
De ahí que su «medida alta de la vida cristiana» la ponga en práctica entrando en la «periferia social y existencial» que aumentaba en Turín, entonces capital de Italia y ciudad industrial que atraía a centenares de jóvenes en busca de trabajo.
Quiero terminar esta breve reseña con el final del mensaje que el Papa Francisco envió a los capitulares del Capítulo General 28 reunido en Valdocco (Turín):
Es de todos conocida la cercanía de este Papa a la Familia Salesiana.
Son significativos los vínculos con algunos Salesianos relevantes para su vida, durante sus años de estudiante en el Instituto de Ramos Mejía y su devoción a María Auxiliadora.
El papa Francisco sorprende por el conocimiento profundo del carisma de Don Bosco.
Verdaderamente el Papa Francisco simpatiza con Don Bosco.
Luciano García Medeiros
0 comentarios