Antonio Valín Valdés

Autor: Mateo González
On 18 junio, 2024

Antonio Valín Valdés, nuevo obispo electo de Tui-Vigo

Cuando al final de la procesión de María Auxiliadora el pasado 24 de mayo el obispo de Tui-Vigo Luis Quinteiro Fiuza saludaba a los fieles en el ambiente flotaba cierto aire de despedida.

Así, al día siguiente, la nunciatura anunciaba el nombramiento del actual vicario general de Mondoñedo-Ferrol, el ribadense de 56 años Antonio Valín Valdés, como nuevo prelado de la diócesis fronteriza.

El nuevo obispo conoce bien a la Familia Salesiana ya que en los últimos años, además de sus encomiendas diocesanas, ha seguido de cerca las actividades de la Asociación de María Auxiliadora de Foz de la que es su delegado espiritual ya que es párroco de esta localidad de A Mariña lucense desde que los salesianos dejaron la gestión de un colegio en el pueblo.

Estas son algunas de sus impresiones.

Antes de nada,

¿cómo ha vivido estos últimos días?

Este realmente está siendo un revoltijo de sentimientos ya que por un lado está la sorpresa y lo inesperado del nombramiento y por otro lado lo que significa cerrar una etapa de tu vida en la diócesis de la que eres hijo y en la que está tu familia; todo con esperanza e ilusión.

Pasa de la que es, seguramente, la diócesis más rural de Galicia a la que tiene mayor concentración urbana,

¿cómo se le presenta el cambio?

Ciertamente es grande, pero yo encaro todo esto sabiendo que llego a una Iglesia particular que tiene una historia, unos agentes de pastoral y una gente que están caminando. Es a ese camino al que yo me incorporó y camino con ellos. Lo hago arrimándome a esta tradición y al trabajo de esta Iglesia porque nos toca caminar y seguir bregando.

La de Tui-Vigo también una diócesis con un amplio tejido industrial y abierta al mundo de los trabajadores de la mar.

¿Qué tipo de obispo reclaman estas realidades?

A uno que escuche y esté cercano a estas realidades, que intente descubrir sus peculiaridades, que se ponga a conocerlas en primera persona, pues el mundo industrial o el entorno del mar son ámbitos muy particulares que requieren conocer, escuchar y estar cercanos haciéndose presente en medio de ellas.

Antonio Valín Valdés

Ha sido nombrado obispo en un tiempo en que la Iglesia está metida de lleno en un proceso sinodal,

¿qué implica llegar a una diócesis en medio de esta nueva etapa?

El espíritu del sínodo es ponernos a todos a caminar –y a caminar juntos–. Creo que este es uno de los retos más grandes que tenemos ahora mismo en la Iglesia. Cada uno tiene su papel y tiene que asumir la invitación de Jesús a seguirlo, a comprometerse en la realidad de la Iglesia. Eso no lo podemos hacer por libre, tiene que ser juntos… todo el mundo y el obispo, por supuesto, en medio de la gente y caminando con ellos. Así entre todos iremos viendo caminos y abriendo propuestas nuevas.

En su primer saludo decía que “nos toca vivir un momento de cambios muy rápidos, tanto a nivel social como en el seno de la Iglesia”,

¿cuáles son sus preocupaciones?

A mí me preocupa mucho acoger la situación de cada persona. Hay mucha gente que vive en la soledad o que se encuentra muy perdida. Estamos en un cambio de Iglesia y es verdad que esta, en muchos lugares, es envejecida. Tenemos también el gran reto de seguir anunciando y apasionando a los jóvenes con el Evangelio. Por ello, me parece que una de las grandes preocupaciones debe ser la atención y la acogida a cada persona con su historia personal, con lo que es y con lo que está viviendo… para con ellas caminar y caminar.

Se ha presentado pidiendo paciencia ya que es un “obispo novato” pero en cambio Luis Quinteiro se mostraba seguro de que usted es “el pastor bueno y valiente que necesitamos”.

¿En qué espera ser pastor valiente?

Entiendo sus palabras desde el cariño, pero lo que quiero es aprender a ser obispo con la gente de la diócesis y aprender a quererlos para, contando con todo el mundo, intentar hacer camino. ¿Con qué programa? Con el que tiene la diócesis y con el Evangelio en la mano. A partir de ahí, intentar vivirlo en cada momento y en cada circunstancia, con cada persona que aporta lo que es, lo que tiene, lo que sueña y lo que espera.

Mateo González

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Comentarios

1 Comentario

  1. Begoña Fernandez Prado

    Enhorabuena al nuevo obispo, parece cercano y sencillo. Caminaremos juntos

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